Hace unas semanas Sostenibilidad a Medida tuvo la oportunidad de viajar hasta Colombia para desarrollar diferentes acciones en materia de sostenibilidad corporativa, incluyendo un proyecto concreto con Celsia, una de las empresas de producción de electricidad mas importantes del país, así como varias charlas en universidades y centros empresariales, donde además aprovechamos para establecer contactos y colaboraciones con empresas relacionadas con servicios de sostenibilidad en Colombia.
Concretamente con GAIA Servicios Ambientales desarrollamos un seminario dirigido a algunas de las empresas mas importantes de Medellín, con el que además de ahondar en la sostenibilidad corporativa y analizar las claves para lograrla, incorporamos una perspectiva hasta el momento apenas abordada en Colombia, la medición del valor que la sostenibilidad aporta a las empresas y la oportunidad que supone para medir la rentabilidad de estas acciones y que la empresa sea consciente de su aporte a la mejora social en su entorno. Sin duda el tema es apasionante, máxime en una ciudad como Medellín, destacada a nivel mundial como escenario de innovación social y donde tanto empresas como administraciones locales están muy interesados en aportar valor a la sociedad para lograr la mejora de las desigualdades y riesgos de exclusión existentes. Por tanto, nos encontramos con un foro ávido de conocer aspectos como SROI o el uso del Capital Natural en la empresa.
Una Estrategia de Sostenibilidad sostenida en tres pilares
A nuestro juicio hay tres pilares fundamentales a la hora de llevar a la práctica la sostenibilidad dentro de una organización:
– Estrategia: Entendida como una hoja de ruta clara, construida en colaboración con los grupos de interés y donde los Valores sean las líneas rojas que determinan hasta donde está dispuesta a llegar la empresa.
– Gestión: Hay que llevar la sostenibilidad al día a día de las empresas, a sus balances fiscales o económicos, a la toma de decisiones diaria y además, que no se quede en una estrategia puntual o que de la que no se haga un seguimiento contínuo y orientado a la retroalimentación de tanto de la Estrategia como de la propia Gestión.
– Comunicación: Una bonita historia que contar, pensada para fomentar la implicación (o el engagement) y que a su vez se haya construido sobre la base de la transparencia, que nos nos cansamos de señalar que es un elemento imprescindible de la sostenibilidad.
Una buena forma de concretar estos pilares sería pensar que la Estrategia ha de reflejarse en el Propósito que persigue una empresa y de otro lado, la Gestión se materializa en el Legado que la misma va a aportar a su entorno, y se trata de construir ambos de una manera participada por los grupos de interés y respaldada por datos e informaciones veraces y coherentes.
¿Cuando logramos que la sostenibilidad sea rentable?
Se trata de una cuestión que hemos abordado en varias ocasiones en Te Hago Eco y que pese a no tener una receta concreta (aunque ya sabéis que huimos de receta predeterminadas) si que creemos que hay varios ingredientes básicos.
El primero es generar valor, y no nos referimos a valor económico (lo que vendría a ser riqueza) o al menos exclusivamente, sino valor para la comunidad, ya sea en forma de contribución o legado para el capital natural del entorno o contribuyendo a mitigar, resolver o compensar determinada problemática social y/o ambiental en el territorio donde se desarrolla. Para ello, y volviendo a los tres pilares anteriores, de nuevo es clave incorporar a la estrategia las iniciativas en materia de sostenibilidad para generar valor que queremos desarrollar, incorporarlas al propósito.
El segundo es medir ese valor generado, entramos de lleno en la gestión y se trata de usar diferentes herramientas que ayuden a poner números a nuestro legado en materia de sostenibilidad. Ya sea a través de los Ecocostes, con una óptica interna porque se trata de priorizar la medición en torno al proceso productivo y la cadena de valor, bien usando el SROI o medición del retorno social de la inversión, si lo que se quiere es comparar los recursos invertidos por una empresa en acciones relacionadas con la sostenibilidad para generar valor en su comunidad frente al valor generado (lo que lleva a tener que poner cifras a ese valor, algo que se debe medir haciendo partícipes a los grupos de interés beneficiados) o por último, usando la óptica del Capital Natural, si se trata de incorporar los servicios ecosistémicos generados en su actividad a la contabilidad de la empresa, generando así una información muy interesante a la hora de priorizar las inversiones de una empresa
Y el tercero, de nuevo, es comunicar efectivamente ese valor generado y aportado a los grupos de interés y la sociedad en general. Si lo que no se mide no existe, lo que no se comunica no se conoce, por tanto si se recurre a la implicación (engagement) de los grupos de interés para medir el valor generado, por ejemplo en el mencionado SROI, con mas motivo comunicar los resultados. Medir y comunicar las cuestiones de sostenibilidad ya van de la mano en la relación con los grupos de interés cuando hablamos de generar valor social o ambiental para la comunidad.
Aquí podéis conocer el contenido íntegro de la presentación, no ya del interesante debate generado en torno a la misma, dado que finalizamos este evento con un mini-taller que sirvió para llevar a ejemplos concretos en relación con las actuaciones en materia de sostenibilidad de las empresas participantes las ideas señaladas.
La experiencia no sólo nos permitió conocer las iniciativas en materia de sostenibilidad de algunas de las principales empresas de Colombia, sino también trabajar con ellas sobre diferentes herramientas que pueden ayudarles a medir el valor que están logrando generar y aportar a su comunidad e instrumentos y canales para comunicarlo de una forma mas efectiva. Esperamos conocer en breve los resultados de la puesta en práctica de algunas de estas iniciativas.
@tehagoeco
Creamos y hablamos de sostenibilidad
Blog de Sostenibilidad a Medida, empresa social de constructoría en sostenibilidad corporativa
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